Dirk Nowitzki: El amor por lo distinto

Lo de escribir para el blog me lo tomo como un momento de relax y disfrute. He preparado café solo sin azúcar, suena en los cascos lofi y siento la lluvia caer a través de la ventana (fenómeno poco común por desgracia por estos lares). He sacado mis notas para saber por dónde empezar a contar este romance y creo que voy a dejar que reine la improvisación del sentimiento. Hablar de Dirk es hablar de mi amor por el baloncesto así que irremediablemente hoy os voy a contar historias de abuelo cebolleta.

Mi llegada al baloncesto

Rondaba los 9 años y deseaba jugar al fútbol (Plot twist jajaja). Como la mayoría de los niños del patio de recreo de los noventa mi pasión era el balompié. Me apunté al equipo del colegio pero aquello fue una total frustración. Era realmente malo (y lo sigo siendo jaja) y mis estadísticas ese año ascendieron a un partido convocado y la frustración de un niño que quería disfrutar del deporte que le gustaba pero no jugaba ni de medio metro fuera del campo. Por esa época, apuntaba a ser bastante alto (me quedé en ‘bajo para el basket’) y no era la primera vez que le comentaban a mi padre que me apuntase a baloncesto. Hoy en día bendigo esa propuesta y la decisión de probar ese deporte que había visto en jugadas espectaculares en la tele. La siguiente temporada empezaron mis andaduras con la canasta y ya nunca las dejé. Tuve la suerte de compartir un equipo y un club de cantera que me influyeron mucho en ser la persona que soy hoy en día. Como curiosidad extra, rechacé realizar unas pruebas de acceso al conservatorio de piano por jugar un campeonato que organizaba mi colegio. Una de esas decisiones punto de inflexión de la vida.


Robin Hood: El amor por lo distinto

Creo que fueron varias las causalidades que me llevaron a este amor incondicional por el jugador alemán. Muchos años de mi etapa de jugador ocupaba la posición de cuatro, por lo que sin duda uno buscaba referentes que jugasen donde él. Además, algo así como un mote de esa época era “guiri” y se hizo común en mi equipo el apelativo cariñoso de ‘Marinski’ en fusión de nuestros apellidos. Me encantaba verlo jugar. Evidentemente, me encantaban los mates y las jugadas espectaculares pero en Dirk veía la excelencia de lo normal. No era un jugador de grandes jugadas acrobáticas, ni atléticas pero el de Mavs te mataba lentamente, cada balón en sus manos era una flecha endiablada.

Obvio que veía a Lebron, Iverson y a tantos otros. Pero cada fadeaway a una pierna, como el de la silueta del parquet del American Airlines Center, me enamoraba más. Aún recuerdo aquella temporada de 2006 cuando casi logran el primer anillo pero los Heat de O’neil y Wade tenían otros planes. Creo que es un buen momento para centrarnos en su carrera, aunque algún apunte añadiré seguro.


One club man de los de antes

Disfrutó de una carrera NBA de 21 años y ya sabéis donde pasó todos esos años. Dirk fue elegido en el puesto número 9 del draft de 1998 por Milwaukee Bucks, pero los Mavs se interesaron en hacerse con sus servicios y los de otro jugón cuyo nombre quizá os suene: Don Steve Nash.

Su juego dejó bastantes dudas en su año de rookie además de tener que luchar contra sus propias inseguridades. Se centró en el entrenamiento duro y en mejorar para poder competir contra esos jugadores tan atléticos que se iba a encontrar en la liga. Además, centró sus esfuerzos en ofrecer una alternativa que por aquel entonces no era tan común: ser un ‘grande’ tirador, ¡y vaya si era un grande tirador! Sus promedios fueron mejorando notablemente, no os quiero aburrir con cifras así que al pie del artículo dejaré algunos stats relevantes para que podáis contextualizar. A partir de la tercera temporada el ascenso de calidad de Dirk era más que notable hasta culminar en el año 2006 con el sabor agridulce de no conseguir el anillo. Ese año perdieron las finales contra los Heat pero el alemán fue proclamado MVP de la temporada siendo el primer europeo en conseguir ese galardón. Como añadido ese año, fue campeón del concurso de triples en el All-Star Weekend de la NBA.

Por fin, en 2011 pudo conseguir el sueño que todos los aficionados a los Mavs y amantes del ala pívot queríamos: el Anillo de la NBA. El quinteto formado por Kidd, Terry, Marion, Chandler y nuestro protagonista de hoy consiguieron hacerse con el anillo ante los Heat de Lebron y Wade. Siendo los underdogs de esta eliminatoria y afrontando las finales con un gran esfuerzo colectivo. Nos dieron el ansiado anillo y terminaron de colocar a Dirk en el ansiado olimpo de los históricos del basket. Por si fuera poco el premio colectivo, el número 41 fue galardonado con el premio a MVP de las finales.

A día de hoy sigue siendo el jugador internacional máximo anotador de la historia y el sexto máximo anotador global situado entre un tal Michael Jordan y un tal Wilt Chamberlain, por si no nos hacemos a la idea de lo que esto significa. Os animo a que busquéis más estadísticas de su carrera, no tienen desperdicio.

 

One-Legged Fadeaway: La patente de un tiro

Era de esa clase de jugadores que no brillaban por su repertorio estético y atlético. Él era más parecido a la ingeniería alemana optimizando al máximo su movimiento estrella. Era ese tipo de jugador que te hace la misma jugada mil veces y seguirás comiéndotela igual. La sincronía del movimiento ejecutado al tempo perfecto para aniquilarte. Su envergadura, lo alto que lanzaba y ese movimiento hacia atrás hacía de este tiro una auténtica pesadilla para las defensas, si sumamos que lo podía ejecutar a la perfección desde la línea de 3: Robin Hood. Por supuesto no era solo su patente, era un luchador nato en la cancha, un tipo humilde, de los que hacen equipo, sin polémicas, fiel a los suyos. Llegó a aceptar bajadas de sueldo por ayudar al equipo. No todo es baloncesto en la vida y creo que Dirk es un símbolo mucho más allá de nuestro deporte y eso sin duda pocos pueden decirlo. Por todo esto puedo decir que ser fan de Dirk Nowitzki fue lo que me hizo ser un MFFL.

¡Gracias Robin Hood!

 

Extra: Estadísticas

Temporada Regular

Año PJ PT MPP %TC %3P %TL RPP APP ROB TPP PPP
1998-1999 47 24 20.4 405 206 773 3.4 1.0 .6 .6 8.2
2005-2006 81 81 38.1 480 406 901 9.0 2.8 .7 1.0 26.6
2010-2011 73 73 34.3 517 393 892 7.0 2.6 .5 .6 23.0

Playoff

Año PJ PT MPP %TC %3P %TL RPP APP ROB TPP PPP
2006 23 23 42.7 468 343 895 11.7 2.9 1.1 .6 27.0
2011 21 21 39.3 485 460 941 8.1 2.5 .6 .6 27.7

Globales

PJ PT MPP %TC %3P %TL RPP APP ROB TPP PPP
1,522 1,46 33.8 471 380 879 7.5 2.4 .8 .8 20.7

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *